¡Vaya partidazo la ida de la semifinal de la Carling Cup entre Manchester United y Manchester City! Lo cierto es que ha compensado el truño que está siendo hasta el momento la Copa de África. Empiezo a escribir con miedo a olvidarme de algo, porque el encuentro de esta noche ha sido para analizar en profundidad, pero no soy yo la persona idónea para ello.
No era un partido cualquiera, era un derby, que además servirá para establecer las bases de lo que puede ser una gran batalla por ser el mejor equipo de Manchester. No es que esta batalla hubiera dejado de existir, pero en los últimos años -y no tan últimos- ha estado claramente decantada a favor del equipo de Ferguson.
Por eso el partido de hoy no era apto para novatos, sólo para gladiadores. En esa lucha podemos decir que ha vencido Tévez, impetuoso como pocos, ya que ha anotado dos goles y ha dado el triunfo en el partido, no así en la eliminatoria, que aún queda abierta para la vuelta en Old Trafford.
Era previsible que hubiera poca especulación en el juego, pero no es que haya habido poca, es que no ha habido ninguna. Los dos equipos han buscado atacar al equipo contrario con un esquema 4-3-3. Ha golpeado primero el Manchester United por medio de Giggs, pero tras el gol, tanto la iniciativa como las mejores ocasiones han sido para el City. Al filo de la primera mitad, el joven Rafael ha agarrado dentro del área a Bellamy y el árbitro ha pitado penalty. Es un poco dudoso, pero la falta es apreciable y se trata de un error de principiante. Tévez empataba desde los once metros.
El «Apache» volvería a marcar a su ex-exipo mediada la segunda parte al aprovechar un balón suelto dentro del área a la salida de un corner. Tras el gol, la avalancha fue de los «Diablos Rojos», que se volcaron sobre la portería de Given. Entró en escena el otro gran gladiador, Wayne Rooney. El niño malo de Inglaterra apareció en todas las jugadas, bajó a recibir, distribuyó el balón y finalizó magistralmente, pero se encontró con un no menos espléndido Given, que salvó a su equipo del empate.