Ya ha pasado un día entero desde que el Real Madrid fuera eliminado de la Liga de Campeones por el Olympique de Lyon, pero los ecos del fracaso todavía retumban. La precipitación a la hora de analizar las causas ha sido inadecuada, pero el tiempo va enfriando por fin las posturas y tanto los involucrados, como los expertos y los aficionados vuelven a dejarse gobernar por la objetividad. El adiós a la Champions League debe ser un hecho con el que estudiar los errores, no el detonante de un proyecto a largo plazo. Y reitero ahora mi defensa a Pellegrini, señalado por la prensa como principal culpable y posible cabeza de turco para la directiva, porque cuando algo no sale como estaba previsto no suele haber, salvo rarísimas excepciones, un único responsable y en el fútbol, son cuatro los elementos implicados. Lee el resto de esta entrada »